Sé que no volverán aquellas poesías,
sé que todo se perdió no sé dónde aquel día.
Puede que jamás vuelva a escribir así,
pero esta vez escribiré sólo para tí.
Mis palabras se sucederán formando cadenas
para acariciar tu alma y deshacerse en ella.
Diluiré en tus manos todas mis sonrisas
y el brillo de mis ojos te acariciará siendo brisa.
Ya no correrán mis miradas furtivas
en busca de escondites donde jamás irás.
Y un sueño de fantasía morirá en mis pupilas
si me ofreces la luna, si esta vez no te vas.