Desván Desastre: 2011

martes, 22 de febrero de 2011

Filomena


Me acariciaron tus manos en el devenir infinito del hastío.
El perfume era fuente de caracteres mudos pero con vida.
Desaliñado el beso en mis manos quedaba,
desatino inconfundible del pesar del tiempo.

Donde va tu nombre en el eco perdido
de la mente enredada en parcas maneras
y las arrugas me convierten en un seso desnudo
sin saber estar. Son estos momentos de cera...

No te pierdas en mis ojos, no busques ya quien era.
No te mezas en las tinieblas del ser que no soy.
Me volé dando tumbos, gaviota prisionera
de la casa, la comida y estas ideas...

Te volaste dando tumbos, ay Filomena...
y a veces vuelves al ser que me amó.
La mirada de niña perdida en la acera
es el desayuno de mañana también.

Un acuario lleno de peces de colores,
tres segundos a tu lado, eso soy yo.

Y ahora Filomena:
 donde irán sin ti mis noches contigo.

jueves, 27 de enero de 2011

De andamios han salido las fronteras de mis manos, de mis pies y de mi cabeza...
Bigas. Asfalto elevado. Un sólo combate. La Vida.

Desvaríos psíquicos que hacen de la mente un lugar de sucesiones laberínticas.

Tengo una meta, un refugio y un sendero. Tengo el Mundo.

Y cuando parece que las palabras fluyen, y bailan y tocan el asfalto desgastando el suelo por el camino... Mis pies se frenan y mi cabeza y mis manos...

Nada hacemos sin Tiempo.


- Un beso muy grande a todos los que os acordáis de mi en tiempos de ausencia (y a los que no también). Busco un hueco, un momento de tranquilidad y desde hace unos meses parece que no aparece... Pero prometo volver, aunque sea en visitas breves donde puedan bailar un poco las manos, y la cabeza y los pies... y el Mundo!